Cuidados post injerto capilar
Cuidados post injerto capilar; desde el día después de la intervención hasta el décimo mes. Después de someterte a un trasplante capilar mediante la técnica FUE, es crucial seguir cuidados específicos para asegurar una recuperación óptima.
Si optas por usar una gorra tras salir de la clínica, mejor tipo beisbol con orificios para que respire el cuero cabelludo, eso sí, asegúrate de que sea suficientemente holgada para evitar contacto con la zona receptora.
Después de un trasplante capilar, es normal que el cuero cabelludo exsude durante los primeros días, lo que puede causar molestias. Aquí hay algunas sugerencias simplificadas para manejar esta situación:
El agua termal es un complemento útil para tu cuidado post-trasplante, ayudando a mantener el cuero cabelludo fresco y aliviado.
Descanso: Es vital descansar adecuadamente después del procedimiento.
Medicación: Asegúrate de tomar las medicaciones prescritas para el dolor y la inflamación.
Hidratación de la Zona Receptora: Comienza a hidratar la zona tratada a partir del dçia siguiente con suero fisiológico, agua de mar o agua termal, aplicando 2-3 pulverizaciones cada dos hora.
Para proteger los injertos mientras duermes, es aconsejable dormir semi acostado y con la cabeza elevada. Usa paños o toallas finas para proteger la almohada y considera una almohada ergonomica (en su caso una hinchable de viaje), para mantener la cabeza en posición estable.
En el día cero, una sola aplicación de Povidona yodada comúnmente conocida como Betadine es suficiente para prevenir infecciones y promover la cicatrización.
Este plan de cuidado inicial asegura que el proceso de recuperación tras un trasplante capilar utilizando la técnica FUE comience de manera efectiva.
Es normal observar pequeños sangrados en la zona donante durante los primeros 2-3 días. En caso de sangrado excesivo, aplicar presión con una gasa durante unos minutos puede ayudar a detenerlo.
Foto de una zona donante después de un implante capilar en su 3º día.
La picazón después de un trasplante capilar es común y generalmente se debe al proceso de cicatrización y la reacción de la piel al injerto. Para aliviar el picor:
Evita tocar o frotar la zona receptora durante los primeros 8-10 días post-trasplante, ya que es un período crítico para la adherencia de los folículos. Los primeros tres días son especialmente delicados, siendo crucial evitar cualquier presión o roce.
Foto de la zona receptora justo después de un implante capilar
Puede presentarse hinchazón en la frente, conocida como edema frontal, que es común. Suele aparecer durante el 2-4 día y desaparecer a los 5 días aproximadamente. Facilita su reducción con masajes suaves con las yemas de los dedos, aplicaciones de frío. Es muy importante evitar agachar la cabeza en la medida de lo posible ya que el suero inyectado en la intervención se puede concentrar en la frente y causar estos hinchazones.
Foto de un edema frontal post implante de cabello
Evita minoxidil y productos con siliconas durante el primer mes para prevenir obstrucciones en el crecimiento del nuevo cabello.
Te aconsejo a utilizar el Serum Regenerador para calmar la piel y promover la cicatrización y la Mousse Higienizante para limpiar la zona sin irritarla.
El cuarto día después de un implante capilar es crítico, ya que inicia la cicatrización del cuero cabelludo. Las incisiones comienzan a sanar, aumentando el riesgo de infección y la formación de costras. Es crucial mantener un cuidado meticuloso para proteger los folículos y asegurar una buena recuperación.
NO puedes realizar movimientos con los dedos o fricción. Si puedes humedecer una esponja con este jabón y exprimirla encima de la cabeza para el chorro se esparza por la parte donde se encuentran los implantes sin peligro ninguno.
Te recomiendo que leas el modo de empleo de nuestra mousse higienizante>> (en esta pagina esta detallado el paso a paso de una correcta limpieza) ya que al ser espuma se reparte mejor de manera uniforme en la cabeza realizando un aseo más profundo con efecto calmante.
Te recomiendo utilizar nuestro serum regenerador>> (en esta página se dispone el modo de empleo y sus beneficios), proporciona una dosis concentrada de humedad, asegurando que el cuero cabelludo permanezca hidratado. Evitará así la sequedad de la piel.
Después del día 10 del implante capilar, las costras comenzarán a caerse naturalmente. Para aquellas costras que no se desprendan por sí mismas, es recomendable masajear suavemente la zona con agua y jabón, preferiblemente usando la máxima cantidad de espuma posible. Este método ayuda a despegar las costras de manera cuidadosa y efectiva.
Foto después de haber desprendido las costras con las yemas de los dedos
Es importante tener en cuenta que durante este proceso puede desprenderse también el tallo del cabello junto con las costras. No obstante, no hay motivo de preocupación, ya que la raíz del folículo sigue intacta bajo la piel, lo que permite que el cabello continúe con su ciclo normal de crecimiento. Esta fase es crucial para garantizar la limpieza del cuero cabelludo sin comprometer el éxito del trasplante.
Foto de un implante con la raíz y su costra
Desde el día 10, evita casco y nadar hasta pasar al menos 15 días.
Estos cuidados aseguran una buena recuperación y un ambiente óptimo para el crecimiento saludable del cabello trasplantado.
Entre la tercera y cuarta semana después del trasplante capilar, se inicia un fenómeno conocido como la «fase de desierto«. Durante este período, es normal observar la caída de la raíz del cabello trasplantado. Es importante entender que este proceso no afecta a los folículos pilosos, que permanecen intactos bajo la piel.
Foto de una zona desierta «shock loss»
La caída del tallo es parte del ciclo natural de reposo del cabello. Esto prepara a los folículos para entrar en una nueva fase de crecimiento activo. Aunque puede ser alarmante ver cómo se cae el cabello trasplantado, este paso es crucial para el desarrollo saludable y sostenido del nuevo cabello.
Después de superar la fase de reposo, los folículos empezarán a regenerar nuevos cabellos.
Durante este periodo, que suele extenderse entre tres y cinco meses después de la cirugía, es posible que el cuero cabelludo muestre un aspecto vacío, o incluso menos denso que antes del procedimiento.
Este crecimiento renovado se hace más evidente a partir del quinto mes post-trasplante. Durante este tiempo, comenzarás a notar cómo el nuevo cabello se desarrolla gradualmente en densidad y textura.
La zona receptora ya no requiere cuidados especiales, solo es necesario protegerla del sol hasta que el cabello vuelva a crecer.
Llegando a los 30 días, podrás retomar tus actividades deportivas habituales y usar casco si es necesario.
Durante esta etapa, puede aparecer enrojecimiento postoperatorio en la zona tratada.
Foto enrojecimiento postquirúrgico en la zona tratada 30 días
Esta rojez varía en intensidad y duración entre los pacientes y generalmente se resuelve por sí sola sin tratamiento adicional, aunque puedes usar algún producto natural como aloe vera para aliviarla.
Es crucial monitorear el cuero cabelludo durante las primeras dos a cuatro semanas post-trasplante para detectar señales de enquistamiento de folículos. Los síntomas a observar incluyen enrojecimiento, hinchazón de pequeños bultos leves, dolor, y la aparición de pus en algunos casos.
Foto de pequeños bultos de folículos pilosos infectados a temprana edad
Ante cualquier indicio de infección, es vital consultar con el cirujano o un dermatólogo. El tratamiento puede requerir drenar la zona infectada y, posiblemente, administrar antibióticos.
Mantener una buena higiene y seguir las indicaciones postoperatorias son fundamentales para prevenir el enquistamiento y asegurar una recuperación efectiva del trasplante capilar.
A partir del segundo al cuarto mes después de tu trasplante capilar, notarás que el cabello nuevo comienza a crecer. Este es un proceso gradual y progresivo, donde el cabello puede aparecer inicialmente de manera asimétrica y más fino y menos denso.
Foto alrededor del cuarto mes en el que se aprecia zonas asimétricas
Con el tiempo, el cabello nuevo ganará en grosor y densidad. Es importante tener paciencia y seguir los cuidados recomendados durante esta fase crucial para el éxito del implante.
Durante los meses cinco al diez después de tu trasplante capilar, verás cómo el cabello nuevo no solo crece, sino que también comienza a adquirir más grosor y densidad. Esta fase es crucial para observar cómo el cabello se integra y se asemeja cada vez más al cabello natural en términos de textura y apariencia general.
Cuidados y Hábitos Saludables
Foto séptimo mes aprox. después de un implante capilar
Expectativas a Largo Plazo Al acercarse al décimo mes, el cabello trasplantado debería estar bien establecido, aunque su maduración completa puede llevar más tiempo. Es importante tener paciencia y mantener un estilo de vida saludable que apoye este proceso.
Es fundamental recordar la importancia de la preparación y el seguimiento médico antes y después de un trasplante capilar, especialmente en lo que respecta a la medicación.
Antes de someterte a un injerto capilar, es crucial seguir las indicaciones médicas que pueden incluir la toma de medicamentos o fórmulas magistrales recetadas específicamente para fortalecer el cabello y preparar el cuero cabelludo para el trasplante. Estos preparativos son esenciales para maximizar la efectividad del procedimiento y mejorar el entorno para el crecimiento de nuevos folículos.
Posteriormente al trasplante, el seguimiento médico continuará siendo una parte crítica del proceso. Es posible que te receten medicamentos que debes tomar según lo indicado para promover la salud del cabello y apoyar el crecimiento de los nuevos folículos. Estas medicaciones pueden ser fórmulas magistrales preparadas específicamente para tu caso o medicamentos estándar acordados por la clínica.
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